sábado, 8 de mayo de 2010

Estampas de una tarde de toros ( tercera entrega)




2 comentarios:

Anónimo dijo...

El toreo es sentimiento y más cuando un hombre se está jugando la vida. El torero de La Puebla en su segunda actuación puso ayer la Plaza de Jerez boca abajo. Tarde de inspiración, de gozo, de transfiguración por parte de un torero que ahora mismo es fiel intérprete del arte puro de torear. Morante realizó ayer, quizás, una de las faenas más importamtes que se han visto en Jerez en estos últimos años. No importó que no le dieran el rabo, el oro lo tiene en sus manos.
(Crónica del Información Jerez)

Anónimo dijo...

Y digo yo, si los toreros entrenan todos los días por qué razón los toros no pueden hacerlo. Mayormente para que haya un duelo de igual a igual. Porque por ejemplo el toro tiene cuernos que hacen pupa, al torero le dan espada, y a los subalternos banderillas, y al picador una vara terminada en lanza. Esto iguala un poco la cuestión de las "armas".

Sin embargo la primera vez que el toro se enfrenta a un humano es cuando sale a la plaza. Pues me parece que no es lo mismo. quien se quiera jugar la vida que lo haga, pero en igualdad de condiciones.