Palos Blancos exige la ubicación original del futuro centro de salud de la zona norte
Rocío Alfaro
07/10/2014 21:52
07/10/2014 21:52
Monumental y por partida doble es el enfado que tienen los vecinos de Palos Blancos, en el entorno de Hipercor, por el proyecto
del centro de salud de la zona norte que llevan años reclamando. El
mayor desengaño de todos es el que se han llevado con las
manifestaciones de la delegada territorial de Salud y Políticas
Sociales, Miriam Alconchel, cuando aseguró que el centro de salud
comprometido en su día para la zona norte “no es necesario”. “Es
lamentable y todo un patinazo que Alconchel realice ahora esas
declaraciones después de todo lo que estamos luchando por ese centro y
de lo saturado que está el de San Benito, que es el que nos pertenece
por zona”, lamenta Jesús Palomo, de la junta directiva de la AVV Palos
Blancos.
Para entender la otra vertiente del cabreo de Pablos Blancos hay que remitirse al menos a 2007, cuando este colectivo, junto con los vecinos de San José Obrero y Las Flores se constituyeron en plataforma para pedir la construcción de este centro de atención primaria. Entonces se barajaron varias ubicaciones, pero la última de la que se habló y que ganó puntos tras la renuncia de Cedown a tener allí su sede fueron unos terrenos de 5.000 metros cuadrados situados a la espalda de la mencionada gran superficie. Una parcela municipal que en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) está reservada a equipamiento público.
En ese momento, apuntan desde Palos Blancos, todos las asociaciones de la plataforma apostaron por este espacio. Esto explica la “sorpresa” de este colectivo al enterarse por la prensa de que a raíz de una reunión en mayo con la alcaldesa se decidió sustituir dicho espacio por un lugar “esquinado y nada céntrico” a la zona de influencia del futuro centro sanitario. El punto exacto es la avenida Antonio Herrera Fandango, cerca de Las Flores, como así se lo plantearon vecinos de esta barriada de forma unilateral a María José García-Pelayo. Por esta razón, teniendo en cuenta que hasta en su día el SAS dio el visto bueno para los otros terrenos, desde Palos Blancos han pedido una reunión a los delegados de Urbanismo y Participación para abordar este tema.
Para entender la otra vertiente del cabreo de Pablos Blancos hay que remitirse al menos a 2007, cuando este colectivo, junto con los vecinos de San José Obrero y Las Flores se constituyeron en plataforma para pedir la construcción de este centro de atención primaria. Entonces se barajaron varias ubicaciones, pero la última de la que se habló y que ganó puntos tras la renuncia de Cedown a tener allí su sede fueron unos terrenos de 5.000 metros cuadrados situados a la espalda de la mencionada gran superficie. Una parcela municipal que en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) está reservada a equipamiento público.
En ese momento, apuntan desde Palos Blancos, todos las asociaciones de la plataforma apostaron por este espacio. Esto explica la “sorpresa” de este colectivo al enterarse por la prensa de que a raíz de una reunión en mayo con la alcaldesa se decidió sustituir dicho espacio por un lugar “esquinado y nada céntrico” a la zona de influencia del futuro centro sanitario. El punto exacto es la avenida Antonio Herrera Fandango, cerca de Las Flores, como así se lo plantearon vecinos de esta barriada de forma unilateral a María José García-Pelayo. Por esta razón, teniendo en cuenta que hasta en su día el SAS dio el visto bueno para los otros terrenos, desde Palos Blancos han pedido una reunión a los delegados de Urbanismo y Participación para abordar este tema.
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